miércoles, 10 de octubre de 2012

Sol edades


Camino con mis soledades a cuestas,
ellas son mis lugares perdidos
la cama vacía,
el café que se enfría.

Camino con mis soledades a cuestas,
ellas son mis coplas gitanas,
mis ojos españoles,
la guitarra afinada para el silencio,
sedosos pómulos de blanca nube,
rojas nalgas de veranos rotos por el odio,
el mar hambriento, carnívoro,
olas indecisas sin voluntad cayendo como hordas aniquiladas
como la espuma navegando hacia al fondo del océano.

Camino sola con mis soledades,
sola dejo los maderos para tapiar el cielo
aceite para que patine el destino
oscuras orlas del vino barato,
un zapato cansado,
la almohada vacía y fría.

Y al final soy una caminante fatigada,
más que nada, pasos sin andar,
más que nada, caídas al hacerse pedazos recuerdos y torpezas,
más que nada, un pie que jamás dio paso alguno,
pasos solo pasos sin cansancio ni dolor no son pasos,
son puro ocaso,
son sin nombre,

¿o es que soy la que jamás aceptó amor alguno,
la que dio nada a cambio de todo,
o viceversa,
o soy todo el sufrimiento sin credo,
o soy su apariencia, su cara, su libertad natural,
su camino solo,
en andas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario