Un misil se enredó en tu pelo,
entre el sol de tus ojos crispados
y el mar de tu vientre,
entre tus manos de poeta
y el pegote de tus besos,
entre el cielo y las cenizas.
Encuéntrame en una lágrima,
en un pedazo de papel,
con aguja e hilo
pintando el infinito con tu sonrisa,
bailando a tu memoria
en cada pagina escrita,
perdido,
hasta el fondo del amor.
No hay comentarios:
Publicar un comentario